La Ortopodología:

Concentra su atención en el tratamiento no quirúrgico de los trastornos biomecánicos de las extremidades inferiores, cuando el movimiento y la función del pie y el tobillo están fuera del rango de los límites normales. Algunos problemas incluyen el dolor del talón, deformidades congénitas, pies planos, lesiones deportivas, juanetes, dedos en martillo, úlceras diabéticas, artritis y tendinitis.

La Quiropodología:

Dentro de esta área se incluyen los tratamientos quiropodológicos no cruentos de los pies causados por trastornos sistémicos, tales como diabetes, reumatoides, vasculares, uñas encarnadas, callosidades, verrugas, micosis, úlceras y curas especializadas para el complejo de la piel y la uña.

La Cirugía Podológica:

La Podología ha desarrollado técnicas específicas y precisas para solucionar muchos de los problemas de los pies tales como la patología ungueal, uñas encarnadas, patologías de partes blandas, verrugas, quistes y cirugía osteoarticular como juanetes, dedos en garra o martillo, aumentando la fiabilidad y la eficacia de la cirugía disminuyendo el tiempo de recuperación.

La Biomecánica:

El estudio de la marcha muestra cual es el grado de armonía de todo el aparato locomotor y las alteraciones que pueden presentar los pies en su deambulación. El análisis de la marcha también se utiliza para observar la eficacia de la recuperación quirúrgica. Además, también es importante para los pacientes diabéticos, dado que la detección precoz y la corrección de las áreas de elevada presión antes de que los síntomas aparezcan, pueden reducir el riesgo de úlceras y la futura amputación de la extremidad inferior.

La Podología pediátrica:

Los Podólogos proporcionan diagnóstico y tratamiento a los problemas de los pies de los niños, tale como los pies planos, trastornos congénitos o hereditarios, o lesiones traumáticas. Si se identifican adecuadamente a una edad temprana, estos problemas pueden ser corregidos con prontitud.

La Podología geriátrica:

El paso del tiempo y las agresiones no corregidas hacen que los pies de la gente mayor requieran una adecuada atención para mantener una buena movilidad. Los pacientes mayores requieren valoración periódica y curas podológicas continuas debido a las complicaciones relacionadas con los trastornos crónicos tales como artritis, diabetes mellitus y trastornos vasculares periféricos. Tales complicaciones pueden afectar a la calidad de vida y a la independencia debido al dolor, posibles infecciones y movilidad reducida.

La Podología deportiva:

Los Podólogos utilizan una variedad de procedimientos para prevenir y/o tratar lesiones a los atletas y aficionados, y para ayudar a optimizar el ejercicio mientras se minimizan las lesiones.

La Podología Física:

La terapia incluye ultrasonidos, estimulación eléctrica o terapias de ejercicios tales como ejercicios isocinéticos diseñados para disminuir el dolor y la inflamación relacionados con los problemas biomecánicos.